lunes, mayo 30, 2011

Muchas cosas pueden cambiarnos la vida, cada minuto, cada persona con la que nos chocamos puede ser un nuevo rocío acariciando un rostro desprevenido.
las vacaciones nos ofrecen otro panorama siempre, así vallamos una tras otra a los mismos lugares, el solo hecho de encontrarnos con una sonrisa de complicidad en el espejo nos alienta a un mañana lleno de diversión dentro de la posibilidades de una carcajada.

miércoles, diciembre 01, 2010

…………………….

Por: Alejandra Saldarriaga Vargas

Que tan inciertos son los caminos, que tan vagos los recuerdos felices y tan escasos los premios recibidos.

Somos victimas de un azar maldito por sus dolientes, que nos sumerge en situaciones inesperadas y nos conduce en su ceno ansioso hasta la verdad y por consiguiente a la muerte.

Cada uno de nosotros es una ficha que se suma a una ruleta, a un ajedrez de bolsillo que a veces se le resbala a un dios e inexplicablemente produce un jaque y como resultado un cuerpo más que deberá ser inhumado.

No encuentro más significado y menos explicación que a la casualidad, me quedo corta de ideas al pensar en lo mucho que he vivido a cuenta de eso que llaman fortuna y lo poco que he ganado en medio de barricadas de hombres ansiosos, en busca de riqueza precoz o de un suceso inesperado que cambie por completo el transcurrir de sus días y ponga fin a la abrumadora maraña de lo cotidiano.

Ahogados en un frenesí de sudor y sexo los hombres le apuestan a la noche por un amanecer diferente, Un premio que les permita huir, postergar, o anestesiar sus vidas y que si bien puede estar en medio de un barco con la sonrisa expuesta a la mas disimiles gentes, con los ojos, las bocas y las mentes descubiertas ante abstracciones conformistas o niños disfrazados de viejos que no esconden las preguntas, ni la autónoma necesidad de explorar y descubrir.

Cortazar nos ofrece la posibilidad de zarpar en un viaje sin destino ni tripulación, de conocer personajes tan profundos como monstruosos, pero sin desvirtuarse de la realidad, de las estratagemas de la economía y las clases sociales; de cambiar de nacionalidad para descubrir entre otros las pericias del azar.

*texto creado a partir de la lectura de los premios de Julio Cortazar*

El Devenir de Generaciones.

Por: Alejandra Saldarriaga Vargas

-El clamor de una vida feliz, de momentos premonitorios que llevarán al génesis de sus días y al último aliento exhalado- Los Buendía, generación tras generación pudieron sentir el grito de la sangre, de la pasión desbordadora del huracán que calcina los huesos de los débiles y uno tras otro con la desgracia a cuestas y rezagada ante la presencia de la soledad.

La soledad, eterna compañera y guía de noches y tardes en las calurosas paredes de la vieja casa de Macondo, lugar que albergó desde las más bajas pasiones hasta el más abundante flujo de bastardos, participe también de una metamorfosis cíclica de personalidades y hechos que condenaron a la desventura a hombres tan intrínsecamente capaces de liderar pueblos como de enloquecer de un día para otro embriagados por el olvido.

El espíritu de crear y transformar el mundo cotidiano en uno soñado, en esa desgarradora espera de acontecimientos y personajes imaginados que fueron parte de la realidad de un pueblo con una historia tan frenética como la de sus habitantes, marcaron el horizonte de muchos por los que corría la sangre de los Buendía, de esa extraordinaria inconformidad y arrebatamiento de ideas y decisiones, esas que un día pusieron fin a su estirpe, condenando los recuerdos a envejecer y dejar de existir tras la muerte.

Hoy no somos mas que invasores en un mundo de espejismos pero no de ilusiones porque abría que tener memoria para recordar como soñar; somos pueblos sumidos en la miseria, la guerra, el odio y la codicia como si cada uno lleva a cuestas la herencia de los Buendía y lo único que hiciéramos fuera desperdiciar nuestra “oportunidad en la tierra” viviendo nuestros 100 años de soledad.

Texto creado a partir de la obra del novel colombiano

Cien años de soledad- Gabriel García Márquez