Modos de contar-perfil.
LA EMOCIÓN DE LA PRIMERA HISTORIA.
Luis Alfonso es un joven de 25 años, de 1.80 metros de altura y 78 kilogramos de peso, de cabello castaño, ojos cafés, nariz grande y labios finamente contorneados y rojizos; de tez blanca y contextura delgada, de manos grandes y uñas descuidadas, que evidencian su hiperactibidad, y su falta de preocupación por mantener una estética impecable. Fonso como le dicen sus amigos es alegre, divertido y muy inteligente.
En medio de una noche de agosto dentro de una discoteca de Andes, (municipio localizado al suroeste de Antioquia-Colombia) contaba a sus amigos con enorme alegría; como cuando un niño tiene su primera bicicleta, el día en que conoció a su novia. "yo la vi en AUPAN (canal comunitario) y me enamoré de ella, luego con un amigo averigüé su número telefónico y empecé a escribirle mensajes anónimos, a pesar de que para ella no era difícil saber quien era yo, pues pertenecíamos al mismo círculo de amigos". Con ojos saltones y tan expresivos que sus palabras sobraban, describía cada instante desde el cortejo hasta el victorioso final en el que por primera vez sus labios probarían de ese néctar adictivo que es el amor.
Su historia continuo hasta que se detuvo a entrar en detalles como: -"ella me dijo que le gustaban los hombres divertidos, que la hicieran reir todo el tiempo, y yo sí que clasificaba, nos miramos fijamente y le pregunté que que diría si yo le propusiera que fuéramos novios y ella sin voltear respondió que estaría encantada". En ese momento Alfonso hecho a reír, como si hubiera conseguido una enorme victoria, y aunque ella no cumpliera precisamente con sus cánones de belleza hoy era su madonna favorita.
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